sábado, 17 de febrero de 2007

Poema sin título.

(martes 28 de febrero de 2006)

Hay tanto que aprender
de todos y de todo,
que se podría recurrir
al suicidio para descansar en paz.

Dejar de lado
por ejemplo;
la exquisita posibilidad
de ser eterna posibilidad,
para que con permiso de Heidegger,
el ser sea alguna vez
el no-ser de Parménides.

Renegar de la poesía
como los románticos
lo hacen con la
anti-poesía.
Ser un xenofobico
no sólo de los desiertos,
los límites y las cordilleras,
e ir en cambio,
a la causa primera de la razón.

Juzgar las verdades
de la misma forma
que los inocentes juzgan a su juez.
Tomar piedras,
-material de escaso vuelo-
y lanzarlas contra Dios.

Lo que es de la tierra
ahora es del cielo.

1 comentario:

Paty dijo...

siempre hay cosas que aprender... te das cuenta de eso cuando asumes que no lo sabes todo... y más aun cuando notas que no-siempre tienes la razón. pero quizás no sea necesario el suicidio para descansar... hay otras formas de sentir la paz... formas que en su tranquilidad están llenas de vida.
puedes intentar dejar de lado muchas cosas, y así aprovechar de renagar de otras tantas, pero tengo la impresión de que sólo lo que fué realmente (lo que "existió" en su más transparente forma de ser y aparecer) volverá siempre... aunque neguemos de ello, aunque no queramos que asi sea...

puedes lanzar todas las piedras a dios... sólo espero que no lo creas en el cielo... porque todas ellas volverán a ti. aunque quizás él si está ahi... arriba, sólo para ser inalcanzable para quienes buscan tomar piedras y lanzarla contra él.