martes, 24 de noviembre de 2009

Amanece

“Amanece. Pero el silencio sigue siendo el mismo, y es como si el aire viajara tranquilo en la nada. A veces imagino que me voy. Otras veces imagino que me veo. Ahora, cuando comienzan a despuntar estas primeras luces del alba, imagino que me veo. Estoy sentado en pijama, con los hombros cubiertos por un chal, el cigarrillo entre los dedos, rodeado de mis libros y con mi sombra de viejo volcada sobre el cuaderno de los tucanes, viendo nacer este nuevo lunes, entregado yo a este rito perseverante y solitario de escribir, de escribir, por ejemplo, que estoy mirando a las nubes y observando sus movimientos, que tan tenebrosos me parecen, pues es como si mi pasado se estampara en trenzas de sangre que vinieran a Veracruz mientras todo mi futuro (no tengo) cayera como una pobre llovizna en el arroyo en el que navega esta lágrima que ha sido mi vida, de la que con las primeras luces del me llega ahora de galope, en este mismo instante, el recuerdo de una vela silenciosa y blanca, fugazmente entrevista en Beranda, la vela de una goleta navegando solitaria por las aguas del Caribe. Yo mismo en otros días.” Enrique Vila-Matas en “Lejos de Veracruz”